No Es Procrastinación: Deconstruir Por Qué Estás Estancadx

Scrabble pieces that spell "You said tomorrow yesterday".

Hay un peso enorme y cargado de juicio en la palabra “procrastinar”. La usamos como una etiqueta para nosotros mismos, una marca de fracaso autoinfligida. "Solo estoy procrastinando". "Siempre lo dejo para después". Lo tratamos como un defecto de carácter, una simple falta de fuerza de voluntad que deberíamos poder superar si tan solo nos esforzáramos más.

Pero, ¿y si no fuera un defecto de carácter? ¿Y si “procrastinar” es simplemente la palabra incorrecta para lo que realmente está sucediendo?

En mi práctica de coaching neuroinclusivo, no aceptamos esa palabra a primera vista. En cambio, nos volvemos curiosos. Tratamos esa sensación de estar estancado no como un fracaso, sino como una señal. Es un mensaje de nuestro cerebro de que hay una barrera de fondo que necesitamos comprender. Cuando deconstruimos esa sensación, a menudo encontramos que no es una sola cosa, sino uno de varios obstáculos.

El Obstáculo de la Iniciación de Tareas

¿Alguna vez te has sentado frente a una tarea, sabiendo exactamente lo que necesitas hacer, pero sintiendo como si hubiera un muro invisible e insuperable entre tú y el primer paso? Esto no es pereza. Es un desafío con la iniciación de tareas, una función ejecutiva central. El “motor de arranque” de tu cerebro está atascado. La conexión entre querer hacer algo y realmente hacerlo se siente rota.

Una Pregunta de Coaching: ¿Cuál sería el primer paso más pequeño y ridículamente simple? No la tarea completa, solo la primera molécula de movimiento, como abrir la laptop o poner un plato en el fregadero.

El Muro del Perfeccionismo

A veces, la tarea que tenemos por delante se siente tan monumental, y el estándar que hemos establecido para ella es tan imposiblemente alto, que el miedo a no hacerlo perfectamente es paralizante. No se trata de retrasar el trabajo; se trata de evitar el fracaso percibido de no cumplir con nuestras propias expectativas. El muro del perfeccionismo se construye a partir del miedo al juicio, a menudo, el nuestro.

Una Pregunta de Coaching: ¿Cómo se vería esto si fuera simplemente “suficientemente bueno” en lugar de “perfecto”? Si me diera permiso para que este fuera un esfuerzo de nota B-, ¿cómo cambiaría mi enfoque?

La Niebla de la Parálisis por Decisión

Un proyecto grande o una meta vaga puede sentirse como estar perdido en una densa niebla. La gran cantidad de posibles opciones y caminos puede ser tan abrumadora que tomar cualquier decisión se siente imposible. No se trata de evitar la tarea, sino de sentirse abrumado por su alcance. Tu cerebro está tratando de calcular todas las variables a la vez y termina en cortocircuito.

Una Pregunta de Coaching: Si solo pudiera concentrarme en una pequeña parte de esto durante los próximos 15 minutos, ¿cuál sería? ¿Qué es lo siguiente que debo hacer, no las próximas diez cosas?

El Susurro de la Interocepción

Nuestros cerebros y cuerpos están profundamente conectados. La interocepción es nuestro octavo sentido: el sentido de nuestro estado interno. A menudo, lo que etiquetamos como “procrastinación” es en realidad nuestro cuerpo enviando una señal que nuestro cerebro está malinterpretando. ¿Realmente estás evitando la tarea, o tienes hambre? ¿Sed? ¿Estás agotadx? ¿Sobreestimuladx? ¿Cerca del agotamiento (burnout)? Tratar de forzar la concentración cuando tu cuerpo no tiene energía es como intentar conducir un coche sin gasolina.

Una Pregunta de Coaching: Antes de exigirle concentración a mi cerebro, ¿qué le he ofrecido a mi cuerpo? ¿He bebido agua? ¿He comido? ¿Me he estirado o he tomado un momento de silencio?

La próxima vez que sientas ese impulso familiar de etiquetarte como “procrastinadorx”, te invito a hacer una pausa. Sé curiosx en lugar de críticx. Pregúntate: ¿cuál es la verdadera barrera aquí?

Comprender la raíz de por qué estás estancadx es el primer paso, y el más compasivo, para avanzar. Ese es el trabajo que hacemos juntos en el coaching: no para forzarte a atravesar el muro, sino para encontrar la puerta que siempre estuvo ahí.

Si estás listx para dejar de luchar contra tu cerebro y empezar a trabajar con él, te invito a agendar una Sesión de Descubrimiento gratuita. Encontremos tu puerta juntxs.

Agenda tu Cita de Descubrimiento
Previous
Previous

El giro inesperado del contacto visual: ¿Quién siente realmente la presión?

Next
Next

Bailando entre Ensueños y Enfoque: Descubre la Magia Neurodivergente del Cerebro